Prácticamente se han acabado los años en los que las grandes fortunas no protegían adecuadamente sus bienes. Años atrás, las personas más adineradas de España optaban por autoasegurarse o contrataban pólizas generalistas no diseñadas para cubrir sus patrimonios tan elevados. Y eso, quienes se aseguraban. Otras, directamente, preferían asumir los riesgos por miedo a que se acabasen filtrando sus datos. Ahora, la confianza de los altos patrimonios en las aseguradoras es máxima y estos clientes lo que más valoran son soluciones a medida de sus necesidades. Y, en lo que respecta al aseguramiento de sus viviendas de lujo, estas son las coberturas y garantías que solicitan.