Aon ha cerrado la compra por 26.140 millones de euros de Willis Towers Watson (WTW), según han dado a conocer en un comunicado al mercado. Destacan que cada accionista de WTW recibirá 1,08 acciones de Aon; de esta manera sus acciones se valoran en 231,99 dólares. La cantidad representada supone una prima del 16,2% sobre la acción del pasado viernes.
La nueva compañía conservará el nombre de Aon y estará localizada en el Reino Unido. El consejero delegado de WTW, John Haley, pasará a ocupar el puesto de presidente ejecutivo y será el responsable de la estrategia de crecimiento e innovación. Mientras tanto, Greg Case, consejero delegado de Aon, dirigirá la compañía, junto a Christa Davies, actual CFO de Aon.
Según las previsiones, la compraventa de la compañía se cerrará en la primera parte de 2021 si no se produce ningún retraso por parte de los legisladores.
Más de 70.000 millones
Según los cálculos la nueva entidad tendrá una valoración bursátil de algo más de 70.000 millones de euros en bolsa. Confían en generar cerca de 10.000 millones de dólares, unos 8.800 millones de euros, de valor adicional para los accionistas por la suma de ambos negocios.
Haley ha manifestado que la combinación de ambos negocios "es un paso natural" en el interés de aportar a los clientes nuevos servicios en áreas de recursos humanos, riesgo y capital. Case afirma que la unión "creará una plataforma más innovadora, capaz de lograr mejores resultados para todas las partes implicadas".
Los ingresos de ambas empresas superaron el pasado año los 17.500 millones de euros. El proyecto de ambas compañías generará en 3 años unas sinergias de 800 millones de dólares y un ahorro en costes de 1.400 millones de dólares, según los cálculos de la entidad.
Antecedentes
El CEO de Aon para Iberia y Oriente Medio, Eduardo Dávila, indicaba a incio de año que el bróker estaba en posición compradora y resaltaba que la posible adquisición de WTW todavía estaba encima de la mesa.
En una entrevista detallaba qué pasó para quela operación se truncara: "Se anunció un día y, aparentemente, murió ese mismo día porque Willis Towers Watson es una compañía que cotiza en la Bolsa irlandesa y, una vez que hay una información o rumor de compra, hay que confirmarlo. Y la confirmación de que había unas conversaciones muy incipientes afectó gravemente ese día al precio en Bolsa de ambas compañías, con lo cual, por cómo se quería diseñar la operación, era inviable en términos económicos", explicaba.